lunes, 22 de diciembre de 2014

Felices Fiestas. Magia, amor y poesía cada día.

Queridos todos y todas
Se acaba un año más. Este es importante porque nos hemos conocido, echado de menos, acercado, descubierto, repasado o reencontrado. En algún momento hemos contactado virtualmente. Quizá incluso nos hayamos visto las caras. Seguro que nos hemos leído las letras. Puede que nos hayamos reído con las mismas bromas, que nos hayamos enfadado en algún momento, que nos hayan puesto en contacto amigos comunes, que nuestra relación sea solo virtual o vaya mucho más allá. A lo mejor solo hemos puesto las primeras piedras de lo que será un fantástico proyecto juntos.
El caso es que hemos cruzado nuestros caminos.
Por eso, quiero desearos unas muy felices fiestas, unas Navidades donde cargar las reservas no solo de calorías para el invierno, sino también de amor, de conciencia, de alegría... de todo lo que da el roce con los queridos y queridas. Y que también tengáis momentos de introspección, que nunca viene mal dedicarse un rato a re-conocerse. 
Que podamos compartir todo esto y lo que os apetezca soñar en un 2015 lleno de colores, éxitos, buena salud y prosperidad.
Mi regalo de este año, un cuento. A partir del minuto 8.


Buena estrella.
Buen camino.


viernes, 5 de diciembre de 2014

Nana Vieja

Nana vieja
Margaret Wild/Ron Brooks
Ediciones Ekaré, 2000/2008
+3
(Reseña publicada en la Revista Adiós nº108 pp 26-27)
¿Cómo despedirse de todo aquello que se quiere? ¿Qué podemos hacer para acompañar a alguien en esta despedida? Nana Vieja y Chanchita, su nieta, llevan mucho tiempo viviendo juntas, compartiendo el día a día. Una mañana, Nana Vieja no se levanta a desayunar y Chanchita tiene que encargarse de todas las tareas. Al día siguiente, aún débil, la abuela se levanta con un montón de tareas que hacer antes de que llegue la noche.
Este álbum se ha convertido en un referente de la Literatura Infantil sobre cómo afrontar la muerte, la propia y la de alguien querido, cómo compartir ese momento que puede convertirse en el de amor máximo, tanto del que se va como hacia el que se va.
Se trata de un cuento con dos historias. Guiados por el narrador, a través de Chanchita vemos, por un lado, cómo la abuela se prepara para morir y, por otro, cómo la propia nieta vive no solo la despedida sino todo el proceso de acompañamiento a alguien que se va. El hecho de que los personajes sean animales “humanizados”, los tonos cálidos y los trazos casi impresionistas de las ilustraciones, los silencios que se intuyen... Todo aporta a una visión muy natural y afectiva de la muerte.

Poder despedirse es una suerte. Dejar las cuentas claras y todo bien atado. Llegar al final con la consciencia necesaria para poder hacerlo nos permite agradecer a la vida todo lo que hemos disfrutado con y de ella. Y acompañar a alguien en su despedida es una oportunidad única de aprender una lección, otro paso más de la vida en común, un momento que puede convertirse en un regalo cuando se da y se ofrece desde el amor que se ha compartido.
Nana Vieja es un canto a las cosas sencillas que llenan el equipaje de nuestra existencia. Una última visita, una despedida consciente que nos invita a llegar a la muerte con la mochila ligera y rebosante de sensaciones y agradecimientos a la vida.